El sindicato independiente pide que el complemento para la reducción de brecha en las pensiones se amplíe a jubilaciones voluntarias y parciales.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, ha dirigido a la Ministra de Igualdad, Dña. Ana Redondo García, un escrito en el que se solicita una modificación normativa para acabar con la discriminación existente en la percepción del complemento de maternidad en el Régimen de Clases Pasivas del Estado. Desde CSIF hemos puesto de manifiesto una desigualdad en el tratamiento de las jubilaciones voluntarias en comparación con el Régimen General de la Seguridad Social.

En el 2021, se introdujo el Real Decreto-ley 3/2021, de 2 de febrero, que revisó el complemento de maternidad por aportación demográfica. Según la normativa vigente, las mujeres que han tenido uno o más hijos y son beneficiarias de una pensión contributiva en el Régimen General de la Seguridad Social pueden recibir dicho complemento, incluso en jubilaciones anticipadas. Sin embargo, las mujeres del Régimen de Clases Pasivas no disfrutan de este beneficio en jubilaciones voluntarias, lo que constituye un trato desigual en situaciones idénticas.

La carta expone que esta discrepancia se traduce en una discriminación que afecta mayoritariamente a las mujeres, y aunque desde CSIF se ha trasladado la cuestión a Función Pública y a Muface, no se ha recibido respuesta alguna. Por ello, se hace un llamamiento al Ministerio de Igualdad para que se realicen las modificaciones necesarias que permitan incluir tanto las jubilaciones parciales en todos los regímenes, como las jubilaciones voluntarias para el personal perteneciente a Clases Pasivas.

Esta discriminación es evidente en el ámbito de la universidad donde las profesoras funcionarias quedan fuera de este complemento (al ser su edad de jubilación forzosa los 70 años) frente a otros colectivos de mujeres del mismo ámbito que sí tienen derecho al mismo.

Este ajuste normativo es crucial para garantizar la igualdad de trato y la justicia social en la percepción del complemento de maternidad, acabando con las actuales desigualdades.